Día a día nuestro cuerpo trata de lidiar con los embates que el estrés le genera, desde dolores físicos hasta trastornos de sueño y hormonales. Es decir, tenemos a nuestro sistema sometido a un funcionamiento extremo y constante que se puede ver reflejado en mal humor y menor rendimiento. Sin embargo, si eres una persona que le gusta entrenar de manera constante y moderada además de llevar una dieta que vincule a un estilo de vida activo y saludable, estás dentro del 25% de personas que llega a regular y disminuir el estrés.
“Cuando haces ejercicio los sistemas en tu cuerpo se comunican mejor, de tal manera que entre más activo eres más eficiente será tu cuerpo en combatir las consecuencias malas del estrés”, comentó Braulio Sandoval, experto en acondicionamiento físico de Smart Fit.
Entrenar te hará sentir bien
Pero… ¿Cómo ayuda el entrenamiento constante y moderado a combatir las consecuencias del estrés? El experto de Smart Fit, nos cuenta más sobre esto.
La respuesta más importante está en las muchas funciones de las endorfinas. En primer lugar, estos neurotransmisores naturales se liberan al realizar actividad física y luchan para regular los niveles de las hormonas dañinas, como lo son la cortisona y la adrenalina que acompañan una respuesta de estrés. Estas pequeñas sustancias también actúan como analgésicos que te ayudan durante el ejercicio para disminuir la sensación de dolor.
El efecto de las endorfinas continúa surtiendo su efecto después de realizar actividad física, ocasionando que te sientas relajado y más optimista. En tu próxima visita al gimnasio, fíjate cómo te sientes después de hacer al menos 10 minutos de ejercicio. Si sientes que se eleva tu estado de ánimo, no sólo es la música motivacional del lugar, son también tus endorfinas actuando.
Recuerda que todo está conectado. Por lo tanto, el efecto de relajación y optimismo de las endorfinas más el agotamiento de energía cuando realizas una actividad física moderada te ayudará a dormir bien en la noche. Al descansar más, estás mejor preparado para combatir las consecuencias del estrés que se pueden manifestar, por ejemplo, en tremendas inquietudes y problemas de salud como la obesidad y la hipertensión.
Combate el estrés cambiando tu vida y cuidando tu salud con una buena dosis de ejercicio.