Aunque existen muchos puntos encontrados sobre si es conveniente el uso del cubrebocas, tanto al practicar algún deporte al aire libre como al realizar algunas rutinas de gym, lo que sí es un hecho es que este accesorio sigue siendo uno de los principales elementos para evitar la propagación del Covid-19. Los cubrebocas están diseñados para ser una barrera que evite la entrada del virus y otras bacterias a través de las vías respiratorias, ayudando en gran medida a detener la propagación del coronavirus.
Otro factor a considerar es que, al ejercitar tu cuerpo, las respiraciones son más rápidas y difíciles, por lo que, al usar un cubrebocas se ejercerá una mayor presión sobre el flujo de aire. En algunas rutinas de gym de intensidad baja a moderada, el esfuerzo se sentirá un poco más difícil de lo normal con un cubrebocas, pero también es cierto que existen algunas acciones, como elegir el material adecuado, que pueden ayudar a disminuir estas limitaciones y que todo dependerá de cada organismo. Recordemos que cada cuerpo es diferente y la forma en que responda ante el uso del cubrebocas no será igual en todos los casos.
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Índice del contenido
El cubrebocas ideal para las rutinas de gym
Algunos puntos a considerar, tanto al elegir el cubrebocas adecuado, como al usarlo para realizar tus rutinas de gym:
Colócalo correctamente
Procura que se ajuste de forma perfecta a tu cara y que cubra completamente desde el tabique de tu nariz y boca, bajando ligeramente en la zona de la barbilla. De los costados, no debe de levantarse o dejar huecos que permitan el paso del aire. Recuerda que si el cubrebocas se encuentra por debajo de la nariz o de la barbilla, no protege y deja de ser funcional, por eso es importante conocer la manera correcta de utilizarlo.
Materiales
Los cubrebocas recomendados por la Organización Mundial de la Salud, los FFP2 y FFP3, están diseñados para prevenir la entrada de cualquier microorganismo a nuestro cuerpo, sin embargo, no están fabricados con materiales que puedan resistir una práctica deportiva. En este caso, tendrás que elegir los cubrebocas de tela con materiales sintéticos y transpirables, con los que se pueda respirar de forma apropiada. El uso de estos cubrebocas, según expertos sugieren, que cuenten con tres capas de tela diferente que funcionen como tres filtros para detener el virus en el mismo.
Tu toalla, un elemento importante
En rutinas de gym de más de 30 minutos de duración, es importante evitar que la humedad complique la respiración. Una opción en estos casos es llevar tu toalla para secar el exceso de sudor, así evitarás mayor humedad en tu cubrebocas durante tu entrenamiento. Te recomendamos ponerte uno limpio una vez que salgas del gimnasio.
Buena transpiración
Los cubrebocas para correr y hacer ejercicio son la nueva apuesta de las marcas deportivas y han comenzado a ofrecer productos que a través de materiales como el poliéster, el spandex y el neopreno reúnen la comodidad y transpirabilidad que convencerán a sus usuarios. La mayoría de ellos se encuentran a la venta solo por internet.
Lavables
Es importante que después de utilizar un cubrebocas en el gym se puedan lavar para eliminar cualquier tipo de agente contaminante que pudiera quedar adherido.
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Uso del cubrebocas en las rutinas de gym
Mientras no exista una vacuna para combatir el Covid-19, el uso correcto del cubrebocas es la mejor forma con la que contamos para protegernos en todos lados, incluso para realizar nuestras rutinas de gym. En Smart Fit, estamos preocupados por hacer de los gimnasios lugares más seguros – con protocolos más exigentes y medidas de higiene reforzadas -, para que nuestra comunidad se sienta tranquila de que podrán seguir realizando sus entrenamientos sin riesgo de contagio.
Siguiendo estos protocolos de la “nueva normalidad” nos permite demostrar a las autoridades que los gimnasios son espacios seguros y sobre todo, que podemos seguir operando para que tú puedas continuar con tus entrenamientos. Por eso, necesitamos de la ayuda de los usuarios – quienes forman parte de esta gran familia -, para desinfectar los aparatos antes y después de su uso, así como tomar una sana distancia, lavarse las manos con frecuencia y evitar tocarse la cara. Recordemos que cuidarnos es también una responsabilidad compartida.
