Aunque tienden a confundirse por ser parte del mismo proceso, la quema de grasa no es lo mismo que la quema de calorías. Por una parte, las calorías son obtenidas a través de la alimentación y proporcionan al cuerpo la energía necesaria para sustentar las funciones del organismo. Las grasas a su vez, son el resultado de las calorías sobrantes que el cuerpo acumula como reserva.
Al realizar ejercicio tu cuerpo utiliza las calorías consumidas recientemente pero al agotarlas, tiene que recurrir a las reservas de grasa en búsqueda de una fuente de energía auxiliar. De esta forma, al crear un déficit de calorías y quemar los depósitos de grasa, se logra perder peso y grasa corporal.
Si por ejemplo consumes 1500 calorías y gastas esas 1500 calorías, no va ocurrir absolutamente nada en tu cuerpo, de ahí que puedan originarse algunas lesiones o inclusive una frustración ante la ausencia de resultados después de dedicar varias horas de entrenamiento. Pero si por el contrario, consumes 1500 calorías y gastas 2000, entonces tu cuerpo comenzará a gastar de la reserva que tiene acumulada y es ahí donde se origina la quema de grasa.
Antes de enfocarte en trabajar partes específicas de tu cuerpo como glúteo, pierna, abdomen o brazo, primero deberás llegar a un peso ideal. Lo recomendable es que reduzcas la ingesta calórica para empezar a quemar las calorías de grasa que tienes acumuladas. Lo siguiente es que sigas un acondicionamiento adecuado con el uso de la caminadora, elíptica o una remadora magnética.
Una vez logrado el primer objetivo, podrás iniciar un entrenamiento para la quema de grasa con algunos ejercicios como los que te dejamos en esta publicación.
Ejercicios para lograr la quema de grasa
Burpees
Ponte de pie y abre tus piernas a la altura de los hombros. Flexiona las rodillas apoyando las manos en el piso. Da un salto para llevar los pies atrás y al caer realiza una lagartija. Regresa al frente y ponte de pie dando un salto.
Saltos alternados como tijeras
Separa las piernas, brincas, las cambias de posición en el aire y caes en desplante.
Desplantes saltados
Junta los pies y da un paso al frente con la pierna derecha. Flexiona las piernas hasta que la rodilla casi toque el piso. Cambia de pierna realizando el mismo movimiento.
Desplantes atrás
Pon los pies juntos y desplaza una pierna hacia atrás y dobla las rodillas. Regresa la pierna al frente elevando la rodilla hacia tu pecho.
Crunches
También conocidas como abdominales tipo sándwich. Acuéstate boca arriba con las piernas y brazos estirados. Eleva las piernas y los brazos hasta que se toquen con los dedos de las manos. Regresa a la posición original.
Saltos pliométricos
Separa las piernas a la altura de los hombros. Da un salto grande hacia el techo y aterriza de manera suave.
Saltar la cuerda
El clásico ejercicio de los boxeadores con una cuerda imaginaria.
Planchas laterales
Te acuestas de lado con el antebrazo apoyado en el suelo, las piernas juntas y los pies en posición de martillo. Levantas la pierna y la regresas a la posición inicial.
Skater
Como si estuvieras patinando, realiza saltos de un lado hacia el otro apoyado en un pie, mientras el otro lo cruzas y con la punta tocas el suelo.
Escaladores
Pon las manos sobre el piso, en una banca o silla, y empiezas a flexionar las rodillas al pecho.
Jumping Jacks
Ponte de pie con las piernas juntas, da un salto y abre las piernas. Con otro salto regresa a la posición inicial con las piernas cerradas.
La rutina comprende la realización de 3 series con los 10 ejercicios, ejecutando la mayor cantidad de repeticiones que puedas durante 45 segundos, con 15 de descanso. Con estos ejercicios desarrollarás un trabajo cardiovascular, resistencia, fuerza y flexibilidad, y con sus resultados está calculada la pérdida de cerca de 700 calorías.